Nira
Etchenique
Dibujo
original de Josefina Robirosa para la primera edición del poemario. Clic y
baja la edición electrónica zipeada. La
reaparición de Diez y Punto con sostén electrónico no es más que la
recuperación de un clásico para que pueda acceder a él no sólo otro tipo
de público, sino un público que con los tiempos que corren jamás hubiera
podido tener acceso a él. Pero que nadie busqueda revelaciones estruendosas.
O detalles escabrosos. Es nada más -y nada menos- que una historia de amor. A
todo o nada. A dar y a recibir. Como si el mundo se fuera acabar o ya se
hubiera acabado. Y no ocurre en la virtualidad o el vacío: el escenario real
es Buenos Aires. Un marco con una visión desusada, poco frecuente, como la
historia de amor misma y como no podía ser de otra manera. Si se cliquea la
delicada ilustración que la artista plástica Josefina Robirosa realizara
para la tapa de la primera edición se va a poder acceder a la bajada
gratis de la edición del libro, cuya tapa, que incluyes los amarillos y
la erosión del tiempo, es la misma de entonces.
Tapa del LP de vinilo
editado con los poemas dichos por la autor y el fueye de Rodolfo Mederos. Con un
clic sobre el facsímil el poema final, el undécimo, el punto final y la
definición, la conclusión de todo.
Este
reprocesamiento a formato .PDF es consecuencia de la digitalización realizada
por Producciones Matus, cuya tapa del 33 rpm se reproduce un poco más
arriba. Las improvisaciones en bandoneón de Rodolfo
Mederos fueron hechas en la cocina del departamento de planta baja de Río
de Janeiro casi esquina Díaz Velez que por entonces ocupaba la autora y el
responsable de la producción y edición del disco no fue otro que Manuel
Matus, El Negro Matus, el mismo que años antes había arribado a
Buenos Aires junto a Armando Tejada Gómez, que musicalizara sus primeros
poemas, los cantara y los popularizara, una misión en que no tardó en tomar
la posta la que era entonces su mujer, menudita y flacuchenta, embarazada del
único hijo que tuvieron, una mestra primaria tucumana que no tardaría en dar
que hablar e instalarse para siempre en el imaginario y la mitología
colectiva mucho más allá de comprovincianos y compatriotas: Mercedes Sosa.
En un esfuerzo
conjunto con Ediciones
BP, se procedió a la digitalización de todo el material sonoro del
LP original, más un casete que estaba arrumbado en la biblioteca de la
escritora, donde habían sobrevivido cuatro tangos consecuencia de la
musicalización de otros tantos poemas de Tempestad es la palabra, otro
poemario aparecido un poco después de Diez y Punto, a cargo del pianista
Sebastián Britos. Por aquel entonces habían montado un espectáculo
literario-musical, con la misma Nira Etchenique en escena, y los cuatro temas
sobrevivieron cantados por Alberto Vega. Una obvia actualización de ella
misma, hoy, mirando la obra y el tiempo transcurrido, aquellas circunstancias
y estas otras, sirven de introducción a un CD de audio donde se intercalaron
sonidos de Buenos Aires, la otra, la necesaria e imprescindible otra que tiene
que ver en toda historia de amor verdadera, y los tangos mencionados. Un
segundo CD es un multimedia montado como si fuera un sitio de la red, toda la
biobiliografía de la autora, los temas, fotos, cada uno de los poemas
recitados como entonces, un videoclip de Buenos Aires y hasta el tango que a
ella más le gusta por encima de muchos otros a los que también tiene de
cabecera. A estos ejemplares es posible adquirirlos en el Cafe Margot, Boedo
esquina San Ignacio, a dos cuadras de San Juan y Boedo, todos los sábados al
mediodía, en el puestito que BAIRES
Popular tiene puesto con muchos de sus otros materiales, fotos de
época, periódicos culturales, pines, informes sobre la identidad ciudadana y
mucho más
Declarado
lugar histórico por el Gobierno de la Ciudad, recién cumplido su primer
centenario, el Margot de noche. Todos los sábados al mediodía, no
importa la temperatura, la lluvia o los huracanas tropicales, ahí, justo sobre
el ventanal luminoso que da a Boedo, los CDs de Nira Etchenique y cantidad de
materiales culturales más. Es el reducto de BAIRES Popular, Ediciones
BP, Papeles de Boedo, los cuadernos Informes del Sur, etc.
Clic y se manda directo al sitio que tienen en la WWW.
La actual
edición electrónica de Diez y Punto conserva los poemas tal cual, sin
las sucesivas correcciones a que la autora los fue sometiendo, sobre todo
cuando daba recitales en público y que anotaba a mano sobre las carillas
dactilografiadas que lejos de haberlas abandonado, en agosto del 2004 seguía
garrapateando para corregir su segunda novela. El motivo que la llevó a tomar
esta decisión, teniendo la oportunidad de ofrecer aquella primera y estas
versiones, con sólo alteraciones parciales, fue que mayoriamente sus lectores
le llegaron a reclamar que para ellos Diez y Punto había sido, era y
será el primero. La vigencia es hoy comprobable porque si aquella primera
versión impresa literalmente estalló sobre las postreras repercusiones de
una relación pasional entre dos personajes notoriamente públicos, bastante
lejos por cierto del cholulaje y lo mediático en términos actuales, la
variada suerte de sus protagonistas ha dejado sólo el poemario y la
perdurabilidad de lo literario. También, para los que gustan de otros
lecturas, aparece muy claramente la radiografía de toda una época, las
relaciones sociales imperantes, los valores vigentes y la monumental, atroz
presencia de La Otra: "No, no", insiste todavía hoy Nira. "No
es la historia de un amor tanguero. Es cierto que por ahí se dice drogados
de Gardel y de Rivero, pero si bien como cualquier amor es universal y el
amor ocurre en cualquier lugar del mundo, en todo momento, no es menos cierto
que se trata de una historia que sólo puede haber sucedido en aquel Buenos
Aires." ¿Todavía más?
La
autora, en la actualidad, leyendo otros poemas en uno de los otros tantos
recitales. Clic sobre la imagen y la voz de Alberto Vega, con el piano del
compositor Sebastián Britos, hacen escuchar Réquiem para Discépolo del
espectáculo literario-musical Tiempo de tangos y tempestad.
|