Estas son algunas fotos, propias y ajenas, actuales y con algunos años, de lo que un poco son los dos extremos del Océano Pacífico. Gentes, paisajes, monumentos, edificios y algunos otros elementos que conforman un mínimo para tratar de aproximarse a dos culturas que se quieren imponer como muy diferentes aunque quizá tanto no lo sean. Fueron elegidas como apoyatura para un poemario publicado electrónicamente.
LA SEBASTIANA
Entre los cerros Florida y Mariposa, casi en el centro muy atrás, en medio de una de las barriadas más pobres, la casa en propiedad vertical, con azotea para el aterrizaje de naves espaciales que levantara el asturiano Sebastián Collado, combatiente de la Guerra Civil Española y que llegó al Valle del Paraíso convencido que tenía que haber un punto panorámico que permitiera ver a las dos bahías. Ahí levantó la casa. Cuando murió, en los '60, por recomendación de amigos, la compró Pablo Neruda. Y la bautizó La Sebastiana. Consideraba que un hombre que ha dedicado su vida a semejante obra, a contemplar la belleza del paisaje y la majestuosidad del mar tenía que tener necesariamente alma de poeta.